MADRID (Reuters) – La batalla interna abierta en Podemos de cara a su futuro se ha saldado con el abandono de los órganos directivos de una de sus fundadoras apenas una semana antes de un decisivo congreso al que los líderes de la formación antiausteridad llegan enfrentados.
En la misma jornada en la que se constataba el desacuerdo entre las corrientes del secretario general, Pablo Iglesias, y del número dos, Íñigo Errejón, la secretaria de Análisis Político, Carolina Bescansa, renunció a repetir en la dirección de un partido que contribuyó a crear en 2014.
"Creemos ser más útiles ayudando, desde una posición distinta, a que nuestra organización afronte en las mejores condiciones posibles los retos que tendrá que superar a partir del 13 de febrero", dijo Bescansa en una carta en la que anunciaba su decisión.
La formación se había puesto de plazo hasta el miércoles para alcanzar un acuerdo que evite a los simpatizantes tener que elegir entre las propuestas de Iglesias y Errejón, las más destacadas para el congreso ciudadano de Vistalegre de la semana próxima junto con las de los anticapitalistas.
Además de la número tres de Podemos, la misiva la firma el hasta ahora secretario de Economía de Podemos, Nacho Álvarez, que opta también por quedarse "al margen" de las disputas entre Iglesias y Errejón, líderes de un partido que consiguió más de cinco millones de votos en las últimas elecciones.
"Son los equipos más fuertes los que están actuando de espaldas a la voluntad de diálogo y acuerdo, voluntad que es compartida por la gran mayoría de las personas inscritas en Podemos", dice la carta.
"Por eso no podemos integrarnos en ninguna de las listas que competirán por la dirección política de la organización", añadieron Bescansa y Álvarez, considerados hasta ahora cercanos a Iglesias y que han tratado en las últimas semanas de que éste y Errejón acercaran posturas.
Los máximos representantes de Podemos, muy unidos en el pasado desde que crearon la formación antiausteridad en el ámbito universitario en 2014, defienden planteamientos divergentes, considerándose el de Iglesias más izquierdista y el de Errejón más transversal y cercano a la socialdemocracia.
Pese a las diferencias, Iglesias ha dicho que, si es reelegido líder del partido, quiere seguir contando con Errejón, que el lunes presentó una página web (www.errejon.info) con sus ideas para el futuro de un partido que pasó de las protestas ciudadanas a las instituciones.
En opinión de Errejón, Podemos ha de cambiar en Vistalegre su estrategia hacia un modelo más aglutinador, en un momento en el que los sondeos sitúan a la formación morada como segunda fuerza política del país tras el PP y por delante de los socialistas.
