KIEV (Reuters) – El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, dijo el jueves que tropas rusas han entrado en su país y que el conflicto militar ha empeorado después de que separatistas respaldados por Rusia tomaron una ciudad clave en el este del país.
Poroshenko dijo que ha cancelado una visita a Turquía y se iba a reunir con jefes de defensa debido a la "situación que se deteriora rápidamente" en la región oriental de Donetsk "mientras tropas rusas han sido llevadas a Ucrania".
Un militar de la OTAN dijo: "Estimamos que más de 1.000 soldados rusos están operando en este momento dentro de Ucrania (…) Están apoyando a los separatistas (y) combatiendo con ellos".
Rusia sostiene que no se ha implicado en la guerra entre rebeldes prorrusos y el Ejército ucraniano, en el que han muerto más de 2.200 personas desde abril.
Niega también haber enviado armas o tropas, a pesar de la captura de 11 soldados esta semana dentro de Ucrania que Moscú dijo que probablemente cruzaron la frontera por accidente.
El enviado ruso al foro de seguridad de la OSCE en Viena dijo que no hay tropas de su país cruzando la frontera ucraniana "en ningún lugar".
Un líder rebelde dijo que su objetivo es Mariupol, un importante puerto y centro industrial más al oeste del país.
La última escalada en la crisis llega sólo dos días después de que los presidentes de ambos países mantuvieran su primera reunión en más de dos meses y acordaran trabajar para el lanzamiento de un proceso de paz.
El consejo de seguridad y defensa de Ucrania dijo que la localidad fronteriza de Novoazovsk y otras partes del sudeste del país han caído bajo control de fuerzas rusas.
"Una contraofensiva de tropas rusas y unidades separatistas continúa en el sudeste de Ucrania", dijo el consejo en una publicación en Twitter.
Agregó que las fuerzas del Gobierno ucraniano se habían retirado de Novoazovsk "para salvar sus vidas" y ahora estaban reforzando las defensas en Mariupol.
El primer ministro ucraniano, Arseny Yatseniuk, instó a Estados Unidos, la Unión Europea y países del G-7 "a congelar activos y finanzas rusas hasta que Rusia retire a las fuerzas armadas, el equipamiento y los agentes".
El presidente francés, François Hollande, dijo que sería "intolerable e inaceptable" si se comprobara que es cierto que soldados rusos han entrado en territorio ucraniano.
NUEVO FRENTE
Los avances rebeldes de esta semana han abierto un nuevo frente en el conflicto justo cuando el Ejército de Ucrania parecía haber ganado terreno, virtualmente encerrando a los separatistas en sus principales bastiones de Donetsk y Lugansk.
Anton Gerashchenko, asesor del ministro ucraniano del Interior, Arsen Avakov, dijo en Facebook: "La invasión del Ejército regular de Putin de Ucrania es ahora un hecho establecido".
El Ministerio ruso de Defensa declinó comentar sobre las noticias acerca de la presencia de tanques rusos en Novoazovsk.
"Las autoridades rusas claramente dijeron muchas veces que no hay tropas regulares rusas allí. Rusia no está tomando parte en este conflicto armado", dijo una fuente diplomática rusa.
Pero una integrante del consejo asesor de derechos humanos del presidente ruso Vladimir Putin, Ella Polyakova, dijo a Reuters que creía que Rusia estaba invadiendo Ucrania.
"Cuando grupos de personas, bajo órdenes de comandantes, sobre tanques, APC (transportes blindados de personal) y usando armas pesadas en territorio de otro país cruzan la frontera, lo considero una invasión", dijo Polyakova a Reuters.
Un periodista de Reuters en el sur de Rusia vio una columna de vehículos blindados y tropas cubiertas de polvo, uno de ellos con heridas en la cara, a unos tres kilómetros de la frontera con la zona de Ucrania que Kiev dice está ocupada por soldados rusos.
La columna se dirigía al este, alejándose de la frontera. Ninguno de los hombres y vehículos llevaba identificación militar estándar y ninguno de los uniformados con los que habló Reuters quiso decir si eran o no soldados rusos.
