Según el Barómetro del Instituto de Estudios Fiscales, el número de contribuyentes que ven aceptable el fraude fiscal en determinadas situaciones ha descendido desde un 41% de 2007 a un 25%. La tolerancia es mayor en las personas que menos presión soportan: jóvenes de entre 18 y 24 años y mayores de 65.
En un escenario de presión fiscal como el que estamos viviendo, la sociedad se muestra sensible al grado de cumplimiento de las obligaciones tributarias aunque este efectivo cumplimiento más a la Inspección de Hacienda que al sentido cívico. Sólo 4 de cada 10 encuestados por el Instituto de Estudios Fiscales piensan que, aunque persisten los engaños a Hacienda, e incluso los casos de notorio incumplimiento fiscal, en general, el pago de los impuestos se realiza de un modo bastante correcto (41 por 100). Frente a estos ciudadanos, una proporción mayor (59 por 100) considera que el fraude fiscal es una conducta generalizada entre los contribuyentes españoles. Esa percepción es común a todos los segmentos de ocupación, aunque se aprecia un pesimismo ligeramente mayor entre los más jóvenes de 18 a 24 años (73 por 100).
España es uno de los países de la UE que más avances ha realizado en la simplificación de su sistema tributario en los últimos ocho años: desde 2006, el tiempo medio dedicado al cumplimiento con Hacienda ha descendido desde las 298 horas hasta las 167 horas actuales. Asimismo, el coste total de la carga tributaria de las compañías españolas ha descendido 23 puntos porcentuales, del 61,8% hasta el 38,7%: así se desprende del informe Paying Taxes 2013, elaborado por PwC Tax and Legal Services, el despacho de abogados y asesores fiscales de PwC, junto con el Banco Mundial e IFC.
Profesionales y autónomos son los colectivos más afectados por el impacto del IVA y el del IRPF. El primero por la subida del tipo general y del reducido -del 8 al 21 por ciento-, y el segundo porque el alza de las retenciones del IRPF impacta directamente en sus actividades. Félix García de Pablo, ponente del Tribunal Económico-Administrativo Central comentaba en la anterior subida del IVA que “en una situación de grave crisis económica, el aumento del tipo general y reducido del I.V.A, aparte de la subida del IRPF, determinará un retraimiento del consumo. Para evitar esta situación los profesionales podrían asumir el coste de dicho incremento y evitar la subida del precio de sus servicios, como han señalado entidades de un cierto relieve. Sería una situación transitoria hasta la recuperación de la situación económica, cuando podrá repercutirse el incremento al cliente”.
“Hay que tener en cuenta -matizaba García de Pablo- que el tipo general del 21% para los profesionales se encuentra dentro de la media aplicada en la Unión Europea”.
Impuestos indirectos entre 2008 y 2012. Fuente: KPMG Tax Rates on line
Rechazo al fraude fiscal
La evolución de las opiniones de los ciudadanos respecto al cumplimiento tributario tiene los siguientes ejes:
- La retención salarial continúa siendo considerado el factor decisivo para el correcto cumplimiento de las obligaciones tributarias.
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- el control ejercido por la Inspección de Hacienda en la conducta tributaria, permanece como el segundo factor importante para el correcto cumplimiento fiscal.
- a la conciencia cívica de los contribuyentes se le sigue atribuyendo una influencia relativamente menor en la mejora del cumplimiento fiscal.
Fuente: Instituto de Estudios Fiscales
Entre los ciudadanos entrevistados en por el Instituto de Estudios Fiscales predomina la percepción relativa a un aumento del fraude fiscal en la última década. Un 11 por 100 de estos ciudadanos se abstiene de opinar sobre el tema, pero entre quienes sí lo hacen, casi tres tercios de los encuestados (el 71 por 100) piensan que el fraude ha aumentado frente al 18 por 100 que opina lo contrario. Medido este juicio en una escala de 1 a 4 (cuyo punto medio es 2.5), la valoración media resultante es de 2.0, lo que supone una percepción negativa de la ciudadanía con respecto a la evolución de la conducta defraudadora en la última década.
Fuente: Instituto de Estudios Fiscales
Se aprecia cómo son más de tres cuartas partes de la población encuestada en 2011 (el 79 por 100) las que sostienen esta percepción de aumento de la conducta defraudadora, frente a algo menos de la cuarta parte (el 21 por 100) que percibe que el fraude fiscal ha disminuido en la última década.
