MADRID (Reuters) – El jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, se veía el martes presionado por el partido que lo sustenta en el poder para que fuerce la dimisión de la presidenta madrileña, Cristina Cifuentes, contra las cuerdas por presuntas irregularidades en la obtención de un máster universitario.
Pese a haber respaldado a Cifuentes sobre el polémico título, Rajoy se arriesga a que el Partido Popular pierda el poder en la Comunidad de Madrid si Ciudadanos cumple su promesa de apoyar una moción de censura de la oposición en caso de que no se sustituya a Cifuentes antes de fin de mes.
"Esto está en manos de Rajoy: si propone una persona interina que acabe la legislatura habrá estabilidad (..) Si quiere seguir tapando una trama de corrupción, habrá cambio de Gobierno", dijo el martes a su grupo parlamentario el líder de C's, Albert Rivera.
Cifuentes ha descartado la dimisión, atribuyendo las irregularidades a "errores de transcripción" en su expediente en la Universidad Rey Juan Carlos, que está investigando cómo obtuvo la presidenta del PP en Madrid un título en 2012 si, entre otras cosas, no hay constancia de un trabajo de fin de máster.
La dirigente política, de 53 años, ha negado haber recibido un trato de favor, pero la controversia lleva semanas planeando sobre una de las principales figuras del Partido Popular, cuyo nombre sonaba en algunos círculos para reemplazar a Rajoy al frente de la formación conservadora.
Preguntado sobre la amenaza de Ciudadanos, Rajoy se limitó a decir desde Argentina que espera que el asunto se resuelva en una negociación entre los partidos "a la mayor celeridad y con el mayor sentido común posible".
Además de la polémica sobre Cifuentes, las dudas sobre la universidad se acrecentaron el martes a raíz de conocerse que el vicesecretario de comunicación del PP, Pablo Casado, había obtenido el mismo título en 2009 sin acudir a clase y habiéndosele convalidado 18 de las 22 asignaturas.
"No tengo nada que ocultar. Hice lo que se me pidió", dijo Casado en rueda de prensa, defendiendo la legalidad de su título y emplazando al centro universitario a que aclarara el asunto.
"BARAJANDO CANDIDATOS"
El PP trató infructuosamente de acordar los términos de una comisión de investigación sobre este asunto con Ciudadanos, partido que ha hecho de la regeneración de la política uno de sus lemas y que ya forzó un cambio de presidente en Murcia ante un caso de presunta corrupción.
"Quienes quieran conocer el final del caso Cifuentes que vean las películas anteriores: Murcia, Chaves y Griñán y la senadora Barreiro", dijo Rivera en referencia a varios imputados por corrupción hoy al margen de la política.
Mientras el PP volvía a respaldar en público a su presidenta regional el martes, Rivera se mostró convencido de que en el partido conservador estaban "barajando candidatos" para sustituir a una política que gobierna en Madrid desde 2015 gracias al apoyo de Ciudadanos.
Una retirada del apoyo a Cifuentes y el respaldo a la moción de censura daría previsiblemente la presidencia madrileña al exministro socialista Ángel Gabilondo, lo que, según algunos analistas, podría perjudicar los intereses electorales de Ciudadanos y PP a un año de los comicios autonómicos.