BEIRUT (Reuters) – El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, una organización de seguimiento de la guerra con sede en Reino Unido, dijo el lunes que 10 autobuses habían abandonado las aldeas musulmanas chiíes de Al-Foua y Kefraya, cerca de Idlib, llevando evacuados hacia Alepo a través de territorio rebelde.
La evacuación de heridos y otros civiles de estas poblaciones es una condición para la evacuación de personas desde la zona rebelde de Alepo, todavía bajo asedio, informó el domingo un medio de comunicación estatal.
En las últimas horas del domingo, el jefe de la ayuda a Siria de Naciones Unidas, Jan Egeland, dijo que las primeras evacuaciones desde las dos aldeas tendrían lugar a lo largo de la noche, pero añadió en un mensaje de Twitter que otros miles esperaban para partir.
En la última parte rebelde de Alepo, miles de personas esperan para abandonar la ciudad, según indicaron testigos presenciales, muchos de ellos sin hogar tras haber sido desplazados por los combates de las últimas semanas.
El Ejército sirio y sus aliados lograron rápidos avances en Alepo oriental, controlada por los rebeldes que pretenden derrocar al presidente Bashar al Asad, a partir del 24 de noviembre.
Derrotar a los insurgentes en Alepo, la ciudad más grande de Siria antes del conflicto, constituiría la mayor victoria de Asad en la guerra civil que empezó en 2011 tras las masivas protestas contra su Gobierno.