Resumen
- Centrará las reinversiones en los miembros de alta deuda
- El banco central diseñará una nueva herramienta «antifragmentación»
- La prima de rendimiento del bono italiano se relaja
- Lagarde dice que el BCE debe cumplir con el mandato de inflación
FRÁNCFORT/MILÁN, 15 jun (Reuters) – El Banco Central Europeo prometió el miércoles un nuevo apoyo para el endeudado borde sur del bloque, moderando una caída del mercado que amenazaba con una repetición de la crisis de deuda que casi derribó la moneda única hace una década.
Los costos de endeudamiento del gobierno se han disparado en la periferia del bloque monetario de 19 países desde que el BCE reveló planes el jueves pasado para elevar las tasas de interés para controlar la inflación dolorosamente .
Pero el banco no aseguró a los inversores que contendría el aumento de los costos de endeudamiento, haciendo solo una vaga promesa y avivando los temores de que estaba abandonando a las naciones más endeudadas, como Italia, España y Grecia, que han luchado durante años bajo el peso de enormes pilas de deuda.
Invirtiendo el curso solo seis días después, el BCE dijo que dirigiría efectivo a las naciones más endeudadas de la deuda que vence en un esquema de apoyo a la pandemia de 1,7 billones de euros (1,8 billones de dólares) recientemente terminado y que trabajaría en un nuevo instrumento para evitar una divergencia excesiva en los costos de endeudamiento.Publicidad · Desplázate para continuar
«El Consejo de Gobierno decidió encomendar a los Comités pertinentes del Eurosistema junto con los servicios del BCE que aceleren la finalización del diseño de un nuevo instrumento de lucha contra la fragmentación para su consideración por el Consejo de Gobierno», dijo el BCE después de una reunión extraordinaria.
«No podemos rendirnos al dominio fiscal», dijo Lagarde en un foro en Londres. «Tampoco podemos rendirnos al dominio financiero; tenemos que cumplir con nuestro mandato».
El jefe del banco central holandés, Klaas Knot, dijo que las autoridades instruyeron al personal a trabajar a un ritmo acelerado en la nueva herramienta, en caso de que enviar reinversiones al sur no fuera suficiente.
«Si no será suficiente, tenga la seguridad de que estamos listos», dijo Knot en una conferencia.
¿MÍNIMO?
La declaración del BCE calmó a los mercados, pero dejó a muchos decepcionados.
«Creo que esencialmente es el mínimo de lo que se podría esperar, pero también creo que es el resultado más realista de lo que podrían comprometer hoy», dijo el economista de Danske Bank, Piet Christiansen.
Holger Schmieding, economista de Berenberg, argumentó que el BCE simplemente estaba corrigiendo el error de la semana pasada.
«El jueves pasado, tales palabras probablemente habrían hecho una diferencia decisiva y posiblemente duradera», dijo. «Pero después de la agitación de los últimos días, los mercados están ahora más nerviosos que antes. Por lo tanto, el BCE se enfrenta a un mayor riesgo de que los mercados puedan volver a poner a prueba la determinación del BCE pronto».
El anuncio también provocó el fuego de aquellos que argumentaron que el BCE corría el riesgo de ir demasiado lejos.
«El trabajo del BCE es cumplir con la estabilidad de precios, no garantizar condiciones de financiación favorables», dijo Markus Ferber, un miembro conservador alemán del Parlamento Europeo. «Algunos países ahora simplemente reciben la factura por años de políticas fiscales irresponsables».
«Si el BCE ahora lanza otro programa para mantener bajos los diferenciales, se acerca peligrosamente (a) la financiación monetaria estatal», dijo Ferber.
El euro cayó cerca del 1% frente al dólar después de la declaración del BCE, pero los rendimientos italianos se relajaron a cómodamente por debajo del 4%.
Mientras tanto, el diferencial entre los bonos italianos y alemanes a 10 años, un indicador clave, se redujo a alrededor de 222 puntos básicos desde cerca de 250 puntos básicos el martes, lo que indica la confianza en que el BCE eventualmente actuará con más firmeza, tal vez en la reunión de política monetaria del 21 de julio, cuando es casi seguro que elevará las tasas por primera vez en más de una década.
No hay un nivel universalmente aceptado para este diferencial, pero Carlo Messina, el CEO de Intesa, el banco más grande de Italia, dijo el miércoles que los fundamentos económicos del país justificarían de 100 a 150 puntos básicos.
Mientras tanto, el diferencial de los bonos españoles a 10 años tuvo pocos cambios en 126 puntos básicos, mientras que para Grecia se situó en torno a los 262 puntos básicos, en línea con su nivel anterior a la declaración del BCE.
La medida del BCE se produce el mismo día en que se espera que la Reserva Federal de Estados Unidos suba las tasas de interés, con los inversores aumentando drásticamente sus apuestas por un aumento de 75 puntos básicos, un cambio en las expectativas que ha alimentado una violenta venta masiva en los mercados mundiales. leer más
