El Ibex-35 de la bolsa española continuaba recogiendo beneficios ante un panorama general que volvía a plantearse dudas sobre la velocidad de la recuperación económica a escala global después de que algunos indicadores apuntasen un ritmo todavía lento.
El dato de confianza divulgado el viernes en EEUU decepcionó al mercado. Por su parte, el PIB japonés, que el lunes anunció un crecimiento intertrimestral de su PIB del 0,9 por ciento en el segundo trimestre, también decepcionó al mercado pese a mantenerse en la línea de las previsiones.
"Puede ocurrir que los que están viendo que no está claro el rumbo económico, estén aprovechando para recoger beneficios", dijo Nicolás López, director de análisis de M&G Valores.
La bolsa española registraba descensos con mayor fuerza que otras plazas exteriores, en una dirección opuesta a la mostrada hace unas pocas sesiones.
"A los que les entran dudas sobre la economía mundial, lógicamente les entran más dudas sobre la economía española, que está más floja que la de otros países", añadió López.
Los 'blue chips' encabezaban las bajas con caídas del 2,5 por ciento para Telefónica, del 3,3 por ciento para Santander y del 3,8 por ciento para BBVA.
En este clima, a las 1220 horas local, el Ibex-35 bajaba un 2,67 por ciento a 10.611 puntos, mientras el índice general de la Bolsa de Madrid recortaba un 2,66 por ciento a 1.107,43 unidades.
El tono negativo de las plazas bursátiles era refrendado por el recorte de los precios de las materia primas. El precio del petróleo al contado caía por debajo de los 70 dólares después de varias jornadas cotizando por encima de ese nivel.
Los bancos de mediana capitalización también acumulaban pérdidas importantes.
Banco Popular, bajaba un 3,70 por ciento, Sabadell un 3,0 por ciento y Bankinter un 1,4 por ciento.
En el lado opuesto y fuera del Ibex, destacaba la demanda en algunas compañías inmobiliarias como Metrovacesa, Realia, Colonial y Urbas, con alzas comprendidas entre el 10 y el 15 por ciento.
Estas compañías prolongaban las alzas de los últimos días lo que, según expertos, respondería a un interés inversor por entrar en aquellos valores que se habían quedado muy rezagados en las anterior fase alcista del mercado.