MADRID (Reuters) – El Ibex-35 cerró el lunes con un alza de apenas un 0,1 por ciento en lo que fue su décimo cierre consecutivo evitando los números rojos, en una típica jornada prenavideña de escaso volumen en la que la bolsa española sólo abrió media sesión.
La mayoría de los mercados europeos permanecieron cerrados, mientras que otros como el francés, el holandés y el británico también cerraron anticipadamente.
Sin referencias macroeconómicas en la jornada, las negociaciones presupuestarias en Estados Unidos siguieron siendo un foco de atención de los inversores, entre crecientes temores de un inminente "precipicio fiscal" que provocaría duros recortes de gastos y aumentos de impuestos.
En la zona euro, el principal factor seguía siendo la situación política de Italia, donde Mario Monti anunció que considerará la posibilidad de presentarse a los próximos comicios, que le permitirían iniciar un segundo mandato como primer ministro, si sus aliados se comprometen a respaldar su programa de reformas.
En España, el diario El País dijo este fin de semana que la Comisión Europea propondrá metas fiscales más suaves para España en febrero, con el fin de facilitar la salida del túnel de los países atrapados en la crisis de deuda. [
En este contexto, la prima de riesgo española, que mide el diferencial entre la deuda española y alemana, se situó en los 390 puntos básicos, un nivel ligeramente superior al del cierre bursátil del viernes.
El Ibex 35, que en lo que va de año ha perdido más de un 3 por ciento, subió un 0,1 por ciento, a 8.299,5 puntos, mientras que el europeo FTSEurofirst 300 cayó un 0,09 por ciento.
Los valores financieros cerraron mayoritariamente en rojo, con los grandes bancos Santander y BBVA perdiendo un 0,33 y un 0,11 por ciento, respectivamente.
El segundo banco español dijo el lunes que ha acordado la venta a una filial del Grupo Aval Acciones y Valores de la participación que el banco español tiene en su gestora colombiana de fondos de pensiones, lo que le generaría unas plusvalías de 265 millones de euros.
Las mayores caídas del sector bancario se registraron en Caixabank, que cedió un 1,65 por ciento, seguido por Popular, que cayó un 1,59 por ciento.
En positivo quedaron la nacionalizada Bankia y Bankinter, con subidas de un 1,63 y un 0,21 por ciento, respectivamente.
Repsol cayó un 0,15 por ciento, después de que el viernes el tribunal de arbitraje internacional del Banco Mundial aceptara la denuncia realizada hace dos semanas por la petrolera española contra el Gobierno argentino por la expropiación de su ex filial YPF.
Entre otros pesos pesados del selectivo, Iberdrola cedió un 0,95 por ciento, mientras que Telefónica subió un 0,49 por ciento e Inditex se apreció un 1,84 por ciento.
Fuera del Ibex, las inmobiliarias volvieron a protagonizar fuertes subidas, tras las registradas la semana pasada al calor de la opa de exclusión lanzada por los bancos accionistas sobre Metrovacesa.
Colonial subió un 27,8 por ciento, mientras que Realia y Quabit avanzaron un 18,3 y un 20,b por ciento, respectivamente.
La fabricante de materiales de construcción Uralita se apreció un 23,6 por ciento.
A escasas jornadas para cerrar el año, el mejor valor del Ibex ha sido hasta ahora el grupo de hemoderivados Grifols, que ha registrado una subida del 95 por ciento, seguido del gigante textil Inditex, que se ha apreciado un 67 por ciento.
Por el lado negativo, destacan Bankia, con una caída del 81 por ciento, Popular, del 67 por ciento y Sacyr Vallehermoso, que ha perdido el 56 por ciento de su valor.