MOSCÚ (Reuters) – Rusia dijo el lunes que estaba preocupada por las informaciones sobre un baño de sangre en la ciudad siria de Hama y pidió el fin de la violencia.

"Moscú está muy preocupado por la información sobre numerosas víctimas", dijo el Ministerio de Exteriores. "El uso de la fuerza contra civiles y representantes de estructuras estatales es inaceptable y debe cesar".
Activistas de derechos humanos dijeron que 80 civiles habían muerto el domingo en el asalto con tanques a Hama, una localidad del centro de Siria, en uno de los días más sangrientos de los cinco meses de rebelión contra el régimen del presidente Bashar el Asad.