MADRID (Reuters) – El Partido Socialista celebra el lunes su primer comité federal tras el 20-D, en el que sus máximos dirigentes establecerán las condiciones para una posible negociación con Podemos tras los resultados electorales más inciertos de la historia de la democracia en España.
Entre las líneas rojas ya anunciadas por algunos barones socialistas, la negativa a aceptar la celebración de un referéndum de autodeterminación en Cataluña será la condición ineludible para que el secretario general socialista, Pedro Sánchez, comience un diálogo con la formación de Pablo Iglesias.
"No estamos dispuestos a gobernar a cualquier precio", dijo el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández- Vara, a su llegada el lunes a la sede del PSOE en Madrid.
Sánchez ha cerrado la puerta a un nuevo Gobierno presidido por Mariano Rajoy, que con 123 escaños quedó lejos de la mayoría absoluta en las elecciones, y ha anunciado que votará en contra de su investidura para tratar de formar un gobierno progresista en España.
Sin embargo, el líder socialista, que con 90 escaños ha obtenido el peor resultado electoral del PSOE hasta la fecha, se enfrenta a una difícil encrucijada después de que Iglesias pusiera como condición para una eventual alianza la celebración del referéndum independentista catalán.
"Las fuerzas políticas que puedan formar con nosotros una coalición, que es de lo que se trata, lo harán siempre que esas fuerzas políticas no lleven en su planteamiento un referéndum o la autodeterminación de los pueblos de España", dijo el presidente de Asturias, Javier Fernández, a su salida el domingo por la noche de una reunión informal entre líderes socialistas.
Por otro lado, Sánchez -que además de Podemos necesitaría el apoyo de otras formaciones para tener mayoría parlamentaria- se encontraría también en una situación difícil en el caso de que el país vuelva a acudir a las urnas por falta de acuerdo político, con los analistas apuntando a que puede verse cuestionado su liderazgo dentro del partido.
"Si se repiten las elecciones habrá que establecer quién se quiere presentar como candidato", dijo el líder del PSC, Miquel Iceta, apuntando a la posible celebración de primarias en la formación.
Para ser reelegido presidente, Rajoy necesita el apoyo o al menos la abstención del PSOE en un Congreso de 350 diputados, tras contar ya con la abstención de Ciudadanos, que ha propuesto un pacto a tres con PP y PSOE para garantizar la estabilidad de España.
Mientras los socialistas sopesan sus opciones, la incertidumbre será la tónica dominante en las próximas semanas o incluso meses, con numerosos analistas apostando por nuevas elecciones en 2016 como salida más probable al dilema postelectoral español.
