ESTRASBURGO (Reuters) – El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, dijo el miércoles que el Ejecutivo de la UE ofrecería una mejor protección a los refugiados, pero que también mejorará sus defensas fronterizas y deportará a más inmigrantes ilegales.

En un discurso escrito anual ante el Parlamento Europeo sobre el Estado de la Unión, dijo que ofrecería una "respuesta integral, rápida y decidida a la crisis de los refugiados".
Con el problema de la inmigración en lo alto de la lista de prioridades, por delante de la economía,
Ucrania, el cambio climático y el referéndum británico sobre la
pertenencia a la UE, Juncker dijo que la crisis fue causada por "la
guerra, el terror y la inestabilidad en nuestro vecindario".
El dirigente europeo confirmó los planes de pedir a los Estados miembros que acuerden un "mecanismo de reubicación de emergencia" para repartir los solicitantes de refugio que se hacinan en Italia, Grecia y Hungría; un mecanismo permanente para futuras crisis; y una lista común de "países seguros de origen", cuyos ciudadanos estarían sujetos a deportaciones por vía rápida si violan las leyes de inmigración de la UE.
Juncker, cuyas propuestas se enfrentan a la oposición
de unos gobiernos cuyos ministros de Interior se reunirán el lunes,
también se comprometió a mejorar la gestión
de las fronteras externas del bloque, reforzar su agencia fronteriza
Frontex y dar "pasos hacia la creación de sistemas europeos de
guardacostas y control de fronteras".
También propuso un "enfoque más eficaz para las devoluciones", frente a las quejas de que demasiadas personas que no tienen derecho al asilo entran en la Unión ilegalmente y permanecen dentro de sus fronteras, pese a procedimientos judiciales que dictaminan que deben regresar a sus países.
Juncker pidió esfuerzos para fortalecer el sistema de
asilo común de la UE y un calendario de revisión del denominado sistema
de Dublín, entre cuyas reglas se encuentra que las personas deben
solicitar asilo solo en el estado en el que entran en primer lugar en la
UE, lo que tensiona los recursos en los países de primera línea al sur y al este.
En respuesta a las críticas de las agencias de refugiados y migración, dijo que la UE "desarrollaría vías legales seguras para las personas necesitadas de protección" -reduciendo la tentación de arriesgar la vida en peligrosas travesías marítimas y redes de contrabando-, así como un plan permanente para reasentar a los refugiados de otras regiones y una mejor protección de los refugiados que viven en las regiones vecinas de Europa.
Asimismo, renovó una propuesta para revisar el sistema por el cual los trabajadores pueden solicitar la emigración a la UE, abordar la inquietud sobre el envejecimiento del continente que envejece que necesita para atraer a gente nueva.