El futuro presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, presentó el lunes su programa de austeridad para los próximos años y dijo que la gravedad de la situación económica de España solo le permitirá subir las pensiones en 2012.
"El Gobierno dará cumplimiento a uno de sus grandes compromisos electorales: la actualización del poder adquisitivo de las pensiones a partir del 1 de enero de 2012. Este sería, señorías, el único compromiso de aumento del gasto que me van a escuchar en el día de hoy. Insisto, señorías, el único y exclusivo", dijo Rajoy en el debate de investidura.
En su discurso, Rajoy dijo que la primera ley que aprobará el gobierno del PP será la ley de estabilidad presupuestaria que pondrá frenazo a la asunción de nuevas deudas públicas en el futuro. Esta ley fijará en un 0,4 por ciento del PIB el déficit estructural global máximo y sentaría las bases para un recorte progresivo del nivel de la deuda pública hasta el 60 por ciento del PIB desde el 66 por ciento actual.
Otras de las prioridades en su discurso eran el saneamiento del sector financiero y un paquete de reformas de austeridad en sector público para lograr una mayor eficiencia y evitar duplicidades.
"En esta política de contención de gasto a la que los compromisos de estabilidad nos obliga, entendemos que el mayor esfuerzo no puede recaer en los ciudadanos, sino que tiene que provenir de las Administraciones Públicas. Tanto a largo plazo, como con carácter inmediato", dijo Rajoy.
Entre las reformas para impulsar el crecimiento y detener la "sangría del paro", Rajoy dijo que redefinirá el marco fiscal de las pymes y pondrá en marcha una reforma laboral basada en una mayor flexibilidad.