MADRID (Reuters) – El presidente de la Generalitat de Catalunya, Carles Puigdemont, no acudirá al Senado como estaba previsto para responder a la activación de medidas extraordinarias en la región que preside al considerar que el gobierno central tiene tomada la decisión de antemano.

"No acudirá mañana a la sesión del Senado porque el Gobierno español ya ha anunciado que impulsará igualmente el 155", dijo un portavoz de Puigdemont respecto al artículo de la Constitución en el que se apoya el gobierno central para intervenir en la autonomía.
"No perderemos el tiempo con aquellos que ya han decidido arrasar el autogobierno en Catalunya. Seguimos", dijo en su cuenta de Instagram Carles Puigdemont.
Entretanto, diversos medios señalan que el presidente catalán está encontrando aristas no solo entre sus socios de gobierno sino también entre algún miembro de su ejecutivo en relación a si finalmente se opta por hacer oficial entre el jueves y el viernes una declaración unilateral de independencia (DUI).
La televisión pública catalana dijo que Puigdemont convocó una reunión informal de su gabinete esta tarde en el Palau de la Generalitat.
En una entrevista con Associated Press, el vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, dijo que la actitud del gobierno central no deja "otra opción" que proclamar una república.
"Vamos a trabajar para construir una república, porque entendemos que hay un mandato democrático para establecer tal república", dijo Junqueras en la entrevista.
Durante la mañana se publicó extensamente que Puigdemont iba a acudir al Senado a defender su posición el jueves por la tarde, un día antes de que la cámara alta vote las medidas excepcionales de intervención.
El parlamento catalán reúne a su pleno a partir de las cinco de la tarde del jueves, coincidiendo con una comisión del Senado en Madrid que tratará la propuesta de aplicación del artículo 155, y previsiblemente continuará el viernes por la mañana, cuando la Cámara Alta española tiene prevista la aprobación de las medidas solicitadas por Madrid el sábado pasado.
Bajo la amenaza de una declaración de independencia, el Gobierno central pidió autorización al Senado para una aplicación rigurosa del artículo 155 de la Constitución que podría llevar a la destitución del Ejecutivo regional, la intervención del Parlament y la convocatoria de elecciones regionales antes de seis meses.
En las últimas horas se ha especulado con la posibilidad de que una convocatoria de elecciones anticipadas por parte de Puigdemont pudiese paralizar la aplicación del artículo, aunque varios miembros del gobierno central dijeron que no sería suficiente enfriando así las expectativas de comparecencia de Puigdemont en el Senado.
Las medidas que el jueves debate una comisión en el Senado para su votación el viernes podrían entrar en el Boletín Oficial del Estado y ser efectivas el mismo sábado.