MADRID (Reuters) – El independentista Carles Puigdemont anunció el jueves su renuncia provisional a recuperar la presidencia de Cataluña, en un intento de despejar el camino para formar gobierno en una región intervenida desde Madrid a raíz de la declaración secesionista de octubre.

En un mensaje de vídeo colgado en su cuenta de Youtube y otras redes sociales, apenas horas después de que el Parlament le reconociera simbólicamente como el legítimo presidente catalán, Puigdemont dijo que JXC propondría a su número dos, el encarcelado Jordi Sànchez, como aspirante a encabezar el Ejecutivo de la rica región mediterránea.
"Esta decisión se fundamenta en una única razón … en las actuales condiciones esta es la manera de que se pueda acordar un nuevo Govern", dijo.
"Ahora Madrid no tendrá excusa para continuar con la ocupación de nuestras instituciones", añadió Puigdemont, que aprovechó para anunciar que ha presentado una demanda contra el Estado español ante un comité de Naciones Unidas por la violación de la declaración universal de los derechos humanos y la carta de los derechos civiles y políticos.
El mensaje del político catalán llega horas después del primer pleno del Parlament desde las elecciones de diciembre, convocadas por el Gobierno central dentro de las medidas de intervención regional tras la declaración unilateral de independencia de octubre.
Pese a reconocerle como el legítimo líder y reafirmar la validez del referéndum soberanista del 1 de octubre, la cámara regional evitó ratificar la declaración de independencia, en un intento de desbloquear una legislatura en la que los partidos independentistas vuelven a tener mayoría absoluta.
"UN CANDIDATO LIBRE DE CUENTAS CON LA JUSTICIA"
La renuncia de Puigdemont, destituido por el Gobierno central en octubre y autoexiliado en Bruselas, deja paso ahora a Sànchez, aunque no está claro que el último pueda ser nombrado presidente regional porque actualmente está en prisión preventiva y podría ser inhabilitado si finalmente es procesado por sedición.
La causa contra él y otros diputados electos podría tardar en instruirse hasta 18 meses, en virtud de una resolución judicial que pidió el jueves más tiempo dada la complejidad y el número de investigados.
Rajoy dijo el jueves que quien encabece el Ejecutivo catalán debe estar"limpio" judicialmente, y en esa misma línea se pronunciaron durante el debate los representantes de las llamadas fuerzas constitucionalistas, PSC, Ciudadanos y PP, advirtiendo de la inestabilidad que la designación de Sànchez traería para la rica región mediterránea.
"Este pleno del desbloqueo nos ha servido para constatar que no tienen ni hoja de ruta ni proyecto de futuro para los catalanes", dijo Inés Arrimadas, representante de Ciudadanos, el más votado en Cataluña pese a la mayoría independentista conjunta obtenida por JxC, ERC y CUP, con 70 de 135 escaños.
El primer secretario de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, pidió dejar a un lado la división social y política en torno a la independencia, que ha repercutido negativamente en la economía de la región, y abogó por un acuerdo de las fuerzas regionales para obtener de Madrid"más autogobierno y una mejor financiación".
El pleno comenzó con más de una hora de retraso a raíz del debate abierto en la Mesa de la Cámara sobre un planteamiento de los anticapitalistas de la CUP en el que se instaba a reafirmar la declaración de independencia del 27 de octubre y cuya aprobación podría haber tenido consecuencias legales.
"Seguiremos lanzándonos contra el muro hasta derribarlo o saltarlo", dijo Carles Riera, diputado de la CUP, cuyo partido pidió que cese la"deriva autoritaria" del Estado español en Cataluña.