A pesar del escaso predicamento que tienen los silencios en la comunicación, lo cierto es que el empleo adecuado de las pausas y los silencios por parte de quienes nos dedicamos a esta profesión (que se distingue precisamente por el uso de la palabra), constituye una autentica herramienta que nos permitirá obtener beneficios extras en el proceso de comunicación, incluida, por supuesto la escucha. De hecho, tanto en procesos de atención al cliente como en negociaciones con otros compañeros, intervenciones en sala o incluso presentaciones, el uso de las pausas por el abogado es una magnífica oportunidad para alcanzar mayor seguridad y control en dichas interacciones.
Con dicha premisa, el post realiza un exhaustivo análisis del empleo de las pausas y el silencio en la comunicación, tratando aspectos como su naturaleza, beneficios y técnicas más habituales de interacción, todo ello con el objetivo de que el lector reflexione sobre su importancia e implemente en su práctica diaria esta preciada herramienta de comunicación.